En la novena fecha, Defensores de Alto Verde visitó Santo Tomé para chocar con Independiente, y rescató un punto tras el empate sin goles.
Tras un caliente desenlace en el último enfrentamiento contra Independiente, Defensores de Alto Verde buscaba cambiar esa página y continuar con la actual serie de victorias. La tarde fresca y ventosa recordaban a la del batacazo en el Apertura anterior.
Tras la demorada salida al campo de juego por parte del equipo local, ambos procedieron a los pasos protocolares. Saludos, sorteo, y a jugar.
Matias Pereyra señaló el inicio, y entre Giménez y Rosales abrieron la acción del encuentro.
Con gran intensidad encararon los primeros minutos los dos rivales, ida y vuelta. Igual en cuanto a situaciones de peligro, primero fue Independiente el que mostró sus dientes, pero desde temprano la pelota le iba a demostrar su rebeldía al pasar cercana a los palos de Sebastián Ruiz Diaz.
Mientras que por Defensores de Alto Verde, fue Adrián Giménez quien tuvo la más clara de la tarde, pero entre Fidalgo y su travesaño se encargaron de negar el festejo.
No caben dudas que en el ping pong del primer tiempo el local sumó la mayor cantidad de puntos, más allá que la disputa en el juego era muy interesante con posibilidades para ambos, sin embargo, ninguno lograría romper el 0 a 0.
Y si en la primera etapa se generó la impresión de que los santotomesinos arrebataron el arco de Defensores de Alto Verde, el complemento se encargaría de minimizar esa parte. Porque de las que se salvó el conjunto de Horacio Panizza, algunas son inexplicables. En total fueron cinco las veces en que los defensores rojinegros debieron despejar la pelota desde la mismísima línea debajo de su arco (1 Franco, 2 Piedrabuena, y 2 Cabrera). A Ruiz Diaz le tocó una tarde difícil, y varias de sus decisiones fueron milagrosamente corregidas por sus compañeros, a los que tocará agradecerles.
Otro de los que debió sacrificarse por el equipo fue Matias Diaz, que lastimosamente fue expulsado por impedir con el último de sus recursos un claro avance local en el que se veía un gran porcentaje de posibilidad de gol.
Con 10 jugadores, Defensores de Alto Verde le empezaba a encontrar el gusto al empate, aunque cada posibilidad a su favor eran oportunidades de lujo para intentar un triunfo de oro, lo que pudo haber sido en el final del partido.
Sobre los últimos segundos de los 4' adicionados, Defensores orquestó un contragolpe que progresó por derecha hasta colocar la pelota en el área, en el momento en el que uno de ellos cayó en la disputa con su marcador, en lo que supuso el primer penal, pero al quedar la bola en los pies de Giménez corrió la ventaja, y allí sí, el 9 sufrió la clara falta en el gran rectángulo y cayó, al momento en el que Pereyra señaló inmediatamente al punto del penal. Los gritos esperanzados de la numerosa afición Defensora se escuchó en todo el recinto deportivo del Rojo, mientras Giménez, muy rápido preparó la pelota para ejecutar. Pero en el pequeño embrollo de quejas y festejos, el segundo asistente llamó al árbitro principal para informarle sobre la posición adelantada de un jugador rojinegro antes de la infracción, que anuló automáticamente la decisión del penal. Y al ser la última, Independiente la puso en el aire y se terminó.
Los de la cancha, y los del banco lo acorralaron al árbitro en el centro del campo en busca de explicaciones, sin dudas molestos ante la oportunidad negada en el final que les pudo haber dado la victoria, no tan merecida, es cierto, estuvieron más cerca de perderlo que de ganarlo, pero la pelota posada en la mancha del penal a punto de ser ejecutada en la última jugada, terminó por dejarle una sensación agria a Defensores que logró conquistar un punto ante un adversario muy duro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Qué opinás?